Los casos de “inquiokupación” han aumentado en los últimos meses. Se producen cuando personas que tienen intención de okupar una vivienda, en vez de hacerlo por la fuerza, firman un contrato de arrendamiento, y después de uno o dos meses, dejan de pagar. Esta práctica puede desincentivar la puesta de pisos en el mercado de alquiler, una oferta que debe aumentar para que puedan bajar los precios, para facilitar el acceso a la vivienda.
En clave política, Natalia Chueca (PP) cierra la puerta a gobernar el Ayuntamiento con Vox. Desde esa formación insisten en que los “populares” los necesitan para tener gobiernos estables y avisan de que su nivel de exigencia en el cumplimiento de posibles acuerdos será mayor este mandato.