La vicepresidenta del Gobierno de España, Teresa Ribera,no cierra la puerta al mini trasvase del Ebro solicitado por Cataluña para regar el Priorat, en Tarragona, que está fuera de la cuenca, porque asegura que en situaciones de emergencia hay que abrir todas las posibilidades.
Sin embargo, la vicepresidenta del Gobierno aragonés, Mar Vaquero, teme que ese planteamiento sea la respuesta al chantaje de Junts al PSOE o que forme parte de un nuevo pacto oculto entre esas formaciones políticas. Vaquero pide que aclare que tipo de “medidas extraordinarias” sería necesario adoptar para paliar esa situación de sequía y a la vez le recuerda que en Aragón no sobra el agua.