El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, se sumó ayer a la concentración convocada en Pamplona en contra del acuerdo por el que el PSOE facilitará a Bildu la alcaldía de la localidad navarra. Azcón muestra su solidaridad con los pamploneses, que no merecen, dice, ser una moneda de cambio de Pedro Sánchez. Azcón critica las tragaderas de los socialistas, que están cruzando todas las líneas rojas pactando con los herederos de ETA.
Por otro lado, en Cataluña, cuatro colegios profesionales han propuesto crear un “corredor de agua de Cataluña”, como prolongación del minitrasvase del Ebro en Tarragona hacia Barcelona, alegando a la situación de sequía. Las reacciones no se han hecho esperar. El secretario general del Partido Aragonés, Alberto Izquierdo, rechaza cualquier trasvase y critica las intenciones políticas y pagos que subyacen en este asunto.