En la Sierra de Albarracín han manifestado su descontento por el reinicio de las obras del parque eólico Santos de la Piedra, que incluye la construcción de ocho molinos entre los términos municipales de Pozondón, Bronchales y Orihuela.
Los trabajos estaban paralizados por el período de anidamiento de la alondra ricotí, un ave en peligro de extinción que habita en la zona, catalogada como ZEPA, pero se retomaron a finales del pasado mes de agosto y en estos momentos ya se están colocando los postes de los aerogeneradores.
El ayuntamiento de Pozondón ya denunció el parque hace tres años, pero como el proyecto contaba con el reconocimiento de interés público perdieron la demanda.
Desde la Asociación de Empresarios Turísticos de la Sierra de Albarracín solicitan la paralización de las obras y una reordenación que evite situar estos macroproyectos en lugares en los que causan tanta afección.