Alrededor de 500 personas se concentraron ayer ante las puertas del ayuntamiento de Teruel para apoyar a los vecinos del edificio de la calle San Francisco que colapsó hace un año y que han presentado una reclamación por posible responsabilidad patrimonial contra el Ayuntamiento de Teruel en la que reclaman al consistorio más de 4 millones de euros.
Casi tres millones y medio por daños materiales y el resto por daños morales. A esta cantidad habría que sumar otros gastos para responder a las reclamaciones que han presentado contra ellos las comunidades de propietarios de edificios colindantes, otras aseguradoras, y posibles alquileres futuros.
A partir de ahora el ayuntamiento dispone de un plazo de 6 meses para resolver.