La campaña de riegos para la trufa negra de Sarrión empezará en quince días con las obras del regadío social terminadas, pero sin conexión a la red eléctrica. Los trabajos han costado 18 millones de euros y con la puesta en marcha de la infraestructura se podrán regar un total de 851 hectáreas de campos.
Pero para ello todavía hace falta que se construya la red eléctrica que abastecerá al regadío. El inicio de las obras es inminente, pero mientras tanto los truficultores tendrán que regar sus campos con grupos electrógenos, lo que incrementará los costes de producción tres veces más.
Desde la comunidad de regantes lamentan que tendrán que asumir este sobrecoste porque el año ha sido muy seco y no pueden permitirse cosechar a pérdidas como ha ocurrido este año.