Se espera lleno total mañana con 30.000 espectadores en el concierto de Enrique Bunbury. Supondrá la despedida de La Romareda tal y como la conocemos antes de que el lunes empiecen las obras de demolición de la grada sur, de la antigua gerencia de urbanismo o del edificio “cubo”.
Por otro lado, el Ayuntamiento ha confirmado que el tribunal administrativo de contratos ha desestimado el recurso que paralizó la reurbanización del Portillo. Una buena noticia porque eso permitirá retomar la adjudicación y evitar retrasos. La urbanización de esa cicatriz urbana será el paso previo a la creación, por ejemplo, de zonas residenciales.
