Entre los meses de abril de 2019 y 2020, el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) ha abonado en Aragón ayudas por valor de 725 millones de euros a los trabajadores sujetos a los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo y en prestaciones de desempleo. La pandemia obligó a aumentar los recursos para hacer frente a la avalancha de ERTES en los sectores más afectados y todavía debe regularizarse la situación de unos 6.000 empleados por cobros indebidos.
El director del SEPE en Zaragoza, Fernando de Miguel, reconoce que se han producido errores en el contexto de una situación excepcional. Dice que se ha intentado que todos los trabajadores cobraran en tiempo y forma. Ahora trabajan para seguir regularizando la situación de los trabajadores que cobraron más de lo que correspondía.
En Aragón hay actualmente unos 10.700 trabajadores acogidos a Expedientes de Regulación Temporal de Empleo, y próximamente se incorporarán otros 10.000, debido a la crisis de los semiconductores en la industria de la automoción y a los ajustes en entidades bancarias. El pico se alcanzó en mayo de 2020, cuando había 103.000 empleados sujetos a esta fórmula.
