Nano Modrego, después de pasar por los clubes más grandes del país de fútbol-sala, ha decidido dejarlo a los 42 años, y toda una vida dedicada al balón pequeño de sala, donde consiguió una Liga, ha sido internacional, y también ha levantado una Supercopa. Junto ha Santi Herrero, ha sido el mejor jugador de todos los tiempos. Destacando, además de por su calidad, por su facilidad goleadora, por ello que todos los técnicos lo han querido tener bajo sus ordenes. Pasó por Movistar, Segovia, Burela, etc por supuesto además de jugar con los clubes más importantes de nuestra ciudad, dejando huella en todos ellos.
También Nano, hizo sus pinitos en el fútbol once, en la localidad en la que habita, Cuarte de Huerva, donde estuvo seis meses, para posteriormente volver a la pista con el club Colo-colo, donde destacaron, primero su abuelo, y posteriormente su padre. Ahora habrá que esperar que sigan la saga sus hijos, los cuales, uno de ellos, ya lo practica desde muy pequeño, pero como el mismo dice, lo importante es que hagan deporte, sin importar cuál. Su otro hijo de momento ha elegido el fútbol once, pero incluso aunque se dedicara al baloncesto sería feliz, ya que en su casa destaca el deporte.
El fútbol-sala en Zaragoza, en Aragón, es un deporte con muchos adeptos y que incluso llenaron los aficionados el Príncipe Felipe, cuando Pinturas Lepanto se jugaba el título de liga, ya hace unos años. Nano Modrego, incluso se emociona recordándolo. Con su salida, los que ganan son los niños, que podrán aprender este deporte de una de la grandes figuras que ha dado nuestra comunidad. Desde su anuncio de retirada en las redes sociales, han sido muchas las muestras de cariño de aficionados, y de toda la clase política, que le han felicitado por todos estos años de dedicación al deporte.