Decepcionante partido el cuajado por el Real Zaragoza en el Estadio Municipal de La Romareda frente a un Málaga que se llevó un punto merecido vistos los méritos acumulados por ambos equipos durante el partido. Sobre todo porque desde pasada la primera media hora los de Pellicer se quedaban con diez hombres por expulsión de Kevin Medina y los blanquillos, pese a intentar volcarse en el área rival, no fueron capaces de romper el 0-0 inicial.
Se trata del primer empate como locales de los maños, que hasta ahora habían ganado tres encuentros y perdido otros tres. Por su parte, los andaluces hicieron buena su inercia y cosechaban en el feudo municipal de la capital aragonesa su séptimo empate consecutivo jugando lejos de La Rosaleda. Incluso tuvieron ocasiones en la primera mitad para adelantarse en el marcador, topándose con una grandísima intervención de Poussin. Al final, fue Alfonso Herrero, su guardameta, el mejor del choque, aunque no llegaron a sentirse plenamente agobiados con el paso de los minutos.
Con el rival cerrado, al Real Zaragoza le faltó fútbol por dentro, más acentuado con la ausencia de Samed Bazdar. Tuvo las mejores ocasiones en la cabeza de Iván Azón, que cruzó en exceso su testarazo, y también en las botas de Marcos Luna, que reactivó la banda derecha ofensiva zaragocista, pero sin poder superar a Herrero cuando se cantaba ya el gol prácticamente en La Romareda.
Con el punto cosechado y ya con 15 jornadas disputadas, el Real Zaragoza es sexto con 24 puntos dentro de un comprimido grupo que le hace estar a sólo dos del ascenso directo, ocupado por el Real Oviedo, pero también a sólo tres de la undécima posición en la que s sitúa el Eibar, a priori rival para estar peleando en lo más alto de la tabla.