El presidente de Riegos, José Antonio Pradas, reconoce que la situación hídrica es preocupante en nuestra provincia puesto que el último verano ha sido especialmente seco. Sin embargo, embalses como el Grado, todavía con 160 hectómetros cúbicos, tienen reservas suficientes como para proporcionar agua de boca a las poblaciones durante bastante tiempo.
Por supuesto, las últimas lluvias son bien recibidas pero por el momento están siendo muy escasas. No obstante, los regantes se muestran optimistas con el año hidrológico que comenzará en octubre y que esperan que traiga las precipitaciones necesarias para recuperar las reservas.