Fue el pasado 1 de octubre cuando se cortó la carretera, para poder llevar a cabo trabajos como la cimentación de los voladizos, algunas voladuras, conducciones y drenajes o la ampliación de la calzada en el tramo comprendido entre la Presa de Argoné y Campo. La longitud de la actuación es de unos 12 kilómetros, un tramo que discurre por un espacio natural de elevado interés ambiental y complicada orografía. La previsión del Ministerio es que la obra finalice en 2023, tal y como indicaba la subdelegada del Gobierno Silvia Salazar.
Y otra buena noticia para las infraestructuras en el Alto Aragón porque el Ministerio de Transportes Movilidad y Agenda Urbana ha licitado hoy el estudio para reabrir el túnel ferroviario del Somport.