En los últimos meses se ha dado una alta accidentalidad en las infraestructuras eléctricas situadas en torno al vertedero de residuos sólidos de Huesca, junto a la localidad de Fornillos de Apiés. Esta ubicación supone que transiten la zona un gran número de ejemplares de aves rapaces y córvidos, que acuden a alimentarse de los restos disponibles en el vertedero. Por eso, esta zona va a ser una de las prioritarias en actuar por parte de la Dirección General de Medio Natural.
Hasta ahora, se había actuado en varias de las líneas de la zona pero de forma parcial, con dispositivos antiposada o aislando algunos conductores. Ahora, las medidas correctoras serán definitivas y resolverán completamente la siniestralidad. Para ello, se sustituirán las fases desnudas de las líneas eléctricas por conductores aislados y trenzados, lo que eliminará completamente los riesgos de electrocución.
Lo ha explicado in situ el director general, Diego Bayona, quien ha anunciado que, a partir del próximo año, comenzarán a ejecutarse 5,7 millones de euros en actuaciones para la modificación y corrección de tendidos eléctricos en todo Aragón.