En el año 2015, justo antes de que comenzara el boom de las barberías, Jorge Villarroya abrió la Barbería del Tío Jorge. En este tiempo han conseguido convertirse en todo un referente, siempre con el estilo de la barbería tradicional, e incluso tienen su propia línea de productos.
Al llegar la pandemia del Covid-19, Villarroya explica que tuvieron que reinventarse y en julio de 2020 abrió la Escuela de Barbería. La aceptación fue muy buena y consiguieron cubrir las 20 plazas con las que comenzaron la primera edición (diez en turno de mañana y otras diez en turno de tarde)
Uno de esos primeros alumnos fue Adrián Hernández, con 18 años, se ha convertido en el “barbero revelación” por el buen servicio, el trato y los cortes que realiza a sus clientes. Un reconocimiento que le llegó tras participar en un concurso en Valencia y que ha motivado a adrián as eguir adelante con su formación de la mano de Jorge Villarroya.