El delegado de la Agencia Estatal de Meteorología en Aragón, Rafael Requena, confirma que Teruel capital ha batido un récord histórico de temperaturas en enero. Zaragoza y Huesca no han rebasado esas cifras porque la niebla impide que los termómetros suban a primera hora durante el primer tramo del día.
La agricultura, en jaque
Estas temperaturas impropias de un mes de enero afectan a todos los cultivos y también al sector ganadero. Los árboles frutales necesitan frío y nieblas hasta el mes de febrero, y también la cebada y el trigo, ya que el exceso de calor prolongado podría provocar que maduren antes de tiempo. Desde UAGA esperan que, después de este anticiclón, se normalicen las condiciones del tiempo, para no comprometer las cosechas.
El secretario general de la organización, José María Alcubierre, recuerda que el sector siempre trabaja para adaptarse al cambio climático, modificando variedades o ciclos para depender menos de factores climáticos como la falta de agua. El sector deberá seguir fomentando la investigación ante estos episodios cada vez más habituales.
Problemas en las estaciones de esquí
El anticiclón ha dejado máximas de 20 grados en el Pirineo, en puntos como Odesa, Hecho o Benasque, y hasta 18 grados en la estación de Candanchú. El calor ha provocado un deshielo anticipado a la primavera y la reducción de los espesores en los centros invernales, que trabajan para intentar no reducir los dominios esquiables. Esta situación no ha provocado cancelaciones de reservas en el Valle del Aragón a las puertas de febrero, un mes muy importante por volumen de visitantes.
El presidente de la Asociación Turística y alcalde de Villanúa, Luis Terrén, cree que es un milagro que se esté manteniendo la nieve y reconoce que estas temperaturas en pistas solo se suelen dar en Semana Santa. Aunque se espera que este buen tiempo inusual se mantenga una semana más, espera que caiga después una buena nevada que permita garantizar el resto de la temporada.