A las 23:00, las calles de las ciudades aragoneses se quedaron vacías. Desde el Ejecutivo aragonés apoyan al Gobierno de España para que lo prorrogue el tiempo que sea necesario. En Aragón, por ahora, se mantendrá el horario fijado para el toque de queda, de once de la noche a seis de mañana, y no está previsto llegar a decretar un confinamiento domiciliario.
Apenas se produjeron incidencias. Sin embargo, en Zaragoza la Policía Local detuvo a un joven de 18 años por amenazar de muerte a los empleados de un bar cuando cerraron el local en cumplimiento de las restricciones contra el coronavirus. El portavoz de la Policía Nacional, Rubén Nido, señala que can van a mantener los puntos fijos para garantizar el confinamiento de las tres capitales de provincia y patrullarán las calles de las ciudades para garantizar el cumplimiento del toque de queda.