Aragón toma medidas para intentar frenar los contagios ahora que se ha superado el umbral de epidemia de gripe. Desde hoy, se recomienda el uso de la mascarilla en los centros de salud y residencias de mayores, y será obligatoria en aquellos cuyos directores así lo consideren. Se insta a utilizarla a los profesionales, pero también a los usuarios.
El reto es contribuir a frenar la incidencia de las infecciones respiratorias agudas, que como siempre después de Navidad, sigue aumentando a la espera de alcanzar el pico de contagios en próximas semanas. Esta situación ya está tensionando las Urgencias de los hospitales, pero también los Centros de Salud.
A la hora de ser atendidos, son prioritarios los grupos de riesgo, personas mayores y con patologías que pueden ver su salud comprometida por estas infecciones. En el caso de las personas sanas y con síntomas leves, es mejor limitarse a tratar los síntomas en casa para no contribuir al colapso del sistema. También es recomendable acudir al Hospital si la fiebre – que es habitual al inicio de la infección – reaparece días después, si existen dificultades graves para respirar o si los síntomas se alargan en el tiempo.
El vicepresidente de la Sociedad Aragonesa de Medicina de Familia, Luis Miguel García, considera positivo que Salud Pública recomiende el uso de mascarillas porque es habitual la imagen de pacientes con síntomas sentados junto a personas con factores de riesgo. Pese a la experiencia de la pandemia, nos hemos relajado en el uso de esos elementos de protección que deben ir acompañados de otras medidas como una buena higiene de manos.
Las cifras de ingresos hospitalarios por el incremento de casos de gripe y otras patologías respiratorias continúan en niveles altos. Esto provoca que un año más los hospitales zaragozanos estén saturados, y que algunos como el Royo Villanova, hayan tenido que derivar pacientes en los últimos días por la alta presión. Desde CSIF han reclamado la ampliación de ese hospital zaragozano y valoran que la situación sería mucho peor de no ser por el esfuerzo de los sanitarios.