Comisiones Obreras denuncia la intención del Instituto Aragonés de Servicios Sociales de despedir a 21 trabajadores de las residencias públicas de mayores que gestiona directamente. Está previsto amortizar esas plazas para, en su lugar, crear puestos intermedios de coordinación.
El sindicato considera que, con esa decisión, “se está menospreciando el trabajo” de limpieza o cocina, “reestructurando las plantillas sin tener en cuenta las necesidades concretas de cada centro”. Además, se va en contra de la resolución unánime del Parlamento autonómico, que tras la pandemia acordó reforzar ese servicio público. Por eso, el responsable de acción sindical de Comisiones en el IASS, José Ramón González, reclama un Plan de Empleo específico y advierte de posibles movilizaciones.
El Gobierno aragonés niega la información
La consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, asegura no tener conocimiento de esas afirmaciones y asegura que no se va a producir ninguna amortización de plazas. Recuerda que, en base al nuevo modelo de atención a las personas en las residencias, que se negocia con los sindicatos, puede haber modificaciones de plantillas de las residencias, pero no se van a suprimir puestos.
Broto califica de falsas las informaciones y las achaca a la proximidad de las elecciones.