En lo que llevamos de año, Aragón es la única Comunidad Autónoma en la que ha descendido la venta de coches eléctricos e híbridos. De enero a julio, esa caída es del 16% frente al incremento del 22% de la media nacional. En total, en los siete primeros meses del año se han vendido en Aragón 9.775 vehículos, un 10% menos que en el mismo periodo del año anterior.
El director de marketing de la Asociación de Fabricantes, Félix García, lamenta que las ventas de coches eléctricos sigan sin arrancar, a pesar de la prórroga de las ayudas del Plan Moves. "Hay que tener en cuenta la antigüedad del parque automovilístico; así no vamos a llegar a cumplir los objetivos de reducción de emisiones", añade.
"La industria auxiliar de componentes afronta un gran riesgo", según UGT
El sector de la automoción en Aragón vive momentos de incertidumbre en plena transición hacia la movilidad eléctrica. En las últimas semanas, empresas de componentes como Bosal y Pirineos Metal han anunciado el cese de su actividad, y en la planta de Stellantis, en Figueruelas, la fabricación de los nuevos modelos, Peugeot 208 y Lancia Ypsilon, no compensan la salida del Opel Crossland y el C3 Aircross, cuyo ensamblaje se ha asignado a Eslovaquia.
La instalación de una gigafactoría de baterías ayudaría reforzar el sector en Aragón, pero no es suficiente para garantizar su futuro. Desde UGT, advierten del riesgo que afronta la industria auxiliar, que alcanza los 26.000 trabajadores, y reclaman un mayor apoyo a todas las administraciones.
