Los agricultores aragoneses se enfrentan en estos momentos a un grave problema, según denuncia ASAJA. Y es que son conscientes de que sus producciones no van a ser suficientes para cubrir los costes debido a los elevados precios que se derivan de la crisis energética. Esta situación puede hacer que miles de hectáreas de cereal en nuestra comunidad se queden sin sembrar y ello repercutirá de manera directa en una falta de suministros para las fábricas de pienso.
El presidente de ASAJA Aragón, Fernando Luna, señala que los agricultores "no saben cuál es la base para hacer su planificación". Otros campañas de siembra los agricultores se planteaban el mínimo barbecho que tenían que dejar mientras que ahora la duda es cuál es la mínima superficie que tienen que sembrar. Hay que recordar que la PAC supone de media un 30% de los ingresos de los agricultores, lo que a uno le queda de beneficio, y no se pueden arriesgar a no cobrar y dejar la explotación en números rojos.
La peor parte se la lleva el secano árido donde el incremento de los costes en comparación al año pasado es de 220 euros por hectárea, por lo que se necesitaría obtener 2.300 kilos por hectárea para que salgan los números (el doble que en otras campañas de siembra). En secano fresco y en regadío, el incremento es asciende a 310 y 450 euros por hectárea, lo que respectivamente equivale a 2.900 y 4.000 kilos por hectárea para cubrir costes.
La organización agraria ha solicitado medidas de apoyo para contrarrestar los elevados costes, a través de exenciones fiscales o de la ampliación del barbecho sin penalización en la PAC