Avanzan a buen ritmo las obras en la plaza Inmaculada que este jueves ha visitado el alcalde de Huesca, Luis Felipe, acompañado por los concejales de Urbanismo y Servicios Generales, María Rodrigo y Roberto Cacho, respectivamente. Por el momento, ya se ha demolido el pavimento y la solera de la plaza, y se está trabajando en la instalación de riego y alumbrado público. El siguiente paso será colocar un nuevo pavimento que eliminará las barreras arquitectónicas existentes ya que será una plataforma única.
Los trabajos permitirán mejorar el entorno de la plaza a la espera de que se desarrolle la segunda fase del proyecto de sustitución de la red de saneamiento del Coso Alto y de eliminación de barreras arquitectónicas, en el tramo comprendido entre la calle Moya y la plaza Inmaculada. La obra que se está llevando a cabo servirá de base para la posterior reurbanización, por lo que la plaza no sufrirá cambios en las actuaciones que se lleven a cabo en el futuro.