La congelación de tasas e impuestos marcan las Ordenanzas Fiscales del equipo de Gobierno para 2022. El documento, que recoge 20 modificaciones de ordenanzas, refleja la congelación de tasas e impuestos y el mantenimiento de valores catastrales pese a que el Ayuntamiento deberá afrontar un incremento de gastos el próximo año, como el aumento de retribución del empleado público, el salario mínimo y la subida del precio de la luz, que puede suponer un gasto añadido de 150.000 euros.
El equipo de gobierno aboga por mantener la presión fiscal ya que muchas familias siguen padeciendo las consecuencias de la crisis sanitaria. Así, no se actualizan los valores catastrales lo cual supone una merma de ingresos para las arcas municipales estimada en más de medio millón de euros. Tampoco se incrementa el IBI, el Impuesto de Bienes Inmuebles.
Una de las modificaciones más destacadas es elevar la bonificación del 85% al 95% para la instalación de sistemas de aprovechamiento técnico o eléctrico de la energía solar, tanto en el IBI como en el Impuesto de Construcciones de Instalaciones y Obras (ICIO), y ampliar su aplicación a viviendas de todo tipo y también a empresas.
La mayor parte de las 20 modificaciones que se proponen son criterios técnicos como la redacción de algunos aspectos o actualizaciones de normativas en siete de las 35 ordenanzas fiscales existentes. En la Comisión de Hacienda prevista el 7 de octubre, el resto de grupos políticos podrán presentar sus propuestas, el día 15 se dictaminará el documento con la intención de aprobarlas definitivamente en pleno una semana después.