La ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha recalcado que lo importante es “salvar vidas y no salvar semanas”, por lo que se va a tomar una decisión que deberá ser de aplicación para todas las comunidades y así evitar una cuarta ola de contagios.
Estas medidas incidirán en la contención y limitación de la movilidad, aspectos que comparten comunidades como la de Aragón o Valencia. Para Juan José Badiola, director del Centro de Encefalopatías y Enfermedades Transmisibles Emergentes de la Universidad de Zaragoza, el aumento de contagios no depende sólo de la movilidad sino también de los ciudadanos y de los enfoques y responsabilidad de cada uno.
Retrasar la Semana Santa
Un grupo de investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid proponen retrasar la Semana Santa hasta el día 23 de abril para que el ratio de vacunación fuera mayor, una medida que el profesor Badiola no vería descabellada, ya que se conseguiría tener vacunados a todos los grupos de riesgo.
Badiola considera que los meses de abril y mayo serán meses decisivos para la vacunación ya que en breve se dispondrá de seis sistemas de vacunación que permitirá agilizar el proceso.