Desde el sector agrario han manifestado su preocupación por este tema, ya que "si no hubiera sido por el calor inusual que hemos tenido en las últimas semanas, las previsiones de cosecha serían muy buenas".
Así lo explicado desde la ejecutiva de UAGA Teruel Marcos Garcés, quien ha lamentado que "las altas temperaturas han provocado que el grano no se haya desarrollado adecuadamente, por lo que no ha alcanzado el peso específico deseable".
A esto hay que añadir el otro gran problema al que se enfrentan año tras año los agricultores de cereal de invierno, que es la pérdida de cosecha a causa de los daños producidos por los conejos. "Una plaga que cada vez se extiende por más comarcas aragonesas, llegando incluso a generar daños totales de más del 20% de la superficie cultivada en algunos puntos".