Una investigación de la Guardia Civil había llevado a la detención de cuatro personas relacionadas con una supuesta “secta destructiva” que estaba afincada en la localidad zaragozana de Escatrón, entre los detenidos estaría su líder. Según la investigación, la captación la hacían a través de mensajes de autoconocimiento y desarrollo personal. De momento, la operación continúa abierta y está bajo secreto de sumario.
Las sectas están muy presentes en la sociedad, pero este tipo de grupos que utilizan técnicas de manipulación coercitiva son más peligrosos porque, como explica el psicólogo Carlos Sanz, ejercen un control agresivo sobre el adepto utilizando técnicas como control de sueño, alimentación, aislamiento de amistades o de los medios de comunicación. Generan una idea basada en “nosotros somos lo mejor y lo de fuera es lo malo”.
Carlos Sanz explica que estas técnicas de control mental tienen una puerta de entrada y últimamente, como sucedió en el caso de Escatrón, las redes sociales son las principales. Se empieza la captación y adoctrinamiento cuando son menores de edad y ya cuando cumplen la mayoría se van con la secta, mucho más disponibles y enganchados, siempre con una promesa.
Al hablar de sectas y de captaciones no se puede hablar de un perfil determinado, incluso hay catedráticos especialistas en sectas que afirman que todos son vulnerables ya que se puede utilizar la presión social contra cualquier persona, técnicas fisiológicas como evitar dormir o comer (técnicas de tortura aplicadas en diversos contextos). Sanz recalca que nunca hay que sentirse libre de la influencia y de la persuasión.