Caspe ha sido el lugar escogido para el acto central de esta jornada en la que se ha recordado la Batalla que tuvo lugar entre el 15 y el 17 de marzo de 1938 contra el avance de las tropas franquistas. Verdad, justicia y reparación son los principios que el presidente Javier Lambán ha atribuido a la Memoria Democrática. Pero, todavía queda camino.
El historiador y catedrático de Historia Contemporánea en la Universidad de Zaragoza, Julián Casanova, asegura que es importante que la gente tenga el conocimiento de lo que ocurrió y, sobre todo, que no olvide dónde está el enemigo. Y es que, tanto en la Guerra Civil española como en la actual guerra en Ucrania, la situación puede derivar en un problema de seguridad porque alguien decidió que había que romper el orden político.
Casanova reflexiona sobre los diferentes planos que tienen las contiendas, por un lado el de los historiadores, por otro, los usos políticos que se dan al pasado en función de los intereses. Para el catedrático de Historia Contemporánea, la gestión del pasado es muy importante porque las democracias han de saber realizar esa gestión para no repetir esos errores.