La vida se encarece. La cesta de la compra, el combustible o la energía traen de cabeza a los consumidores, que tienen que estirar el sueldo para comer, moverse y vivir. Pero, ¿cómo decide una marca o un supermercado el precio al que pone a la venta sus productos? ¿Qué parámetros influyen, además de los costes y los márgenes?
María Gómez Campillo explica en su espacio de los martes cómo se fijan los precios. El criterio más básico se basa en el coste de producción y el margen que se establece. También existe el precio por competencia, que depende de en qué franja se quiere posicionar el vendedor en función de los precios de los competidores.
Por otro lado está el precio de mercado, que no se basa ni en costes ni en los precios de la competencia, sino en cuánto se cree que está dispuesto a pagar el consumidor. Algo que practican, por ejemplo, los fabricantes de teléfonos de alta gama, cuyo precio es muy superior al de su coste real. María Gómez Campillo también ha hablado de precios dinámicos, que fluctúan en cuestión de horas o días, como ocurre con los billetes de avión o tren.