En Aragón se calcula que son unas 40.000 personas diagnosticadas de Alzhéimer, una enfermedad neurodegenerativa para la que todavía no hay cura, más del 60% son mujeres y tienen más de 65 años y según la Sociedad Española de Neurología, el 45% de la población cree que es algo inevitable, pero no es así. El estilo de vida puede influir en su desarrollo.
Los juegos de cartas, los puzles o los sudokus pueden ayudar a frenar el deterioro cognitivo. Noelia Soteras, terapeuta ocupacional de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer (AFEDAZ), explica cómo se trata de juegos que hacen ejercitar la mente porque implican atención y concentración en una determinada actividad en un momento concreto.
La terapeuta ocupacional cuenta cómo se trabaja centrándose en las necesidades y características de cada una de las personas ya que cada usuario es diferente. A pesar de que tanto el Alzheimer como las demencias tienen elementos comunes, cada persona es distinta por lo que se necesita utilizar métodos y ejercicios adaptados. Soteras incide en que el objetivo es retrasar el avance de la enfermedad y mantener la capacidades residuales y funciones mentales que mantiene la persona durante el mayor tiempo posible.
El estilo de vida influye a la hora de retrasar la aparición o avance del alzhéimer, independientemente de la edad. Para ello, es importante practicar ejercicio físico, mantener las relaciones sociales y una vida activa. Hacer la lista de la compra, planificar qué hacer al día siguiente o simplemente coger un autobús son actividades que se pueden realizar para ejercitar la mente, como indica Noelia Soteras.