En el último trimestre de 2024, las operaciones de compraventa de vivienda en Aragón crecieron un 26% interanual, el mejor dato desde 2008, gracias a factores como el aumento de los salarios o al descenso de tipos de interés. En el conjunto de todo el año, se registraron en total más de 16.400 transmisiones, lo que supone un aumento del 8,8% respecto a 2023.
Según los datos de la Cátedra del Mercado Inmobiliario, en los últimos meses del año, los precios crecieron un 4% hasta situarse de media en 1.570 euros por metro cuadrado, aunque en puntos de Zaragoza superan ya los 4.000 euros. Aun así, Aragón sigue ofreciendo vivienda más asequible que otros territorios. No llegamos a superar todavía los picos previos al estallido de la burbuja.
Desde el sector valoran que la evolución del mercado es positiva. En la última parte del año pasado aumentó en mayor medida la venta de vivienda de obra nueva. En ese sentido, es necesario aumentar la disponibilidad de suelo e incentivar a los promotores para construir más vivienda y cubrir la demanda, que, en 2025, se mantendrá fuerte. El director de la Cátedra, Luis Fabra, advierte de que, paralelamente, también seguirán subiendo los precios.
En la presentación, responsables del análisis del mercado han destacado que los compradores cada vez tardan menos tiempo en decidir la compra de vivienda de obra nueva y, además, la bajada de los tipos ha incentivado la firma de hipotecas. El 60% de las operaciones requieren de ese tipo de préstamos. De media, se abonan a 24 años con cuotas de unos 590 euros mensuales.
El aumento de la población y la fortaleza de la demanda extranjera también ha animado la compraventa de vivienda. La adquisición por parte de extranjeros ha aumentado cerca de un 9%, especialmente entre personas de Rumanía, Marruecos o China.
Mercado de alquiler
Quienes compran vivienda superan los 35 años. Los jóvenes, a la espera de poder ahorrar para dar el paso, se ven abocados al alquiler. Un mercado constreñido por la falta de oferta derivada de normativas estatales que crean inseguridad jurídica entre los propietarios, o al crecimiento de los alquileres turísticos o de corta estancia. La legislación, que prevé cambios en su regulación a partir de este año, condicionará el comportamiento del mercado.
De momento, los precios del alquiler siguen subiendo y los pisos que se anuncian – que son cada vez menos - encuentran rápidamente inquilinos. Los precios están rozando máximos históricos en las tres capitales aragonesas, con subidas medias de entorno al 8%.
En territorios como Cataluña, las limitaciones de los precios están provocando que el mercado de alquiler esté extinto, según Fabra. El presidente del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Aragón, Fernando Baena, ve necesario dar bonificaciones fiscales o ayudas para la rehabilitación de vivienda para incentivar la entrada de pisos en el mercado. Además, se está a la expectativa de determinados fondos de inversión que se empiezan a fijar en Zaragoza, en un contexto de previsión de aumento de empleo en los próximos años y de nuevos proyectos empresariales.