Sigue bajando el número de contagios en esta séptima ola de pandemia, aunque muy lentamente. Salud Pública notificó ayer 3.213 casos, 135 menos que el domingo de la semana pasada. La tasa de incidencia continúa descendiendo, pero todavía es muy elevada con 5.875 casos por cada 100.000 habitantes en las dos últimas semanas. Los casos siguen disparados en Cuarte con 8.300 contagios por 100.000.
La situación en los hospitales comienza a mejorar, aunque no hay que olvidar que hay 769 personas ingresadas por COVID, 68 de ellas en las Unidades de Cuidados Intensivos. Por ejemplo, sólo en el Miguel Servet de Zaragoza hay 194 pacientes en camas convencionales y 19 en la UCI. El jefe de la unidad, Alberto Carrillo, recuerda que a los ingresos por coronavirus se suman los casos urgentes y las operaciones pendientes para reducir las listas de espera.
Los síntomas y la confusión entre el covid y la gripe
Las terceras dosis están generando muchos efectos secundarios entre los ciudadanos. Los más habituales, fiebre, dolor de cabeza u otros síntomas de gripe. Según los expertos, no tiene que ver ni con la combinación de vacunas ni con otros factores, como haber pasado la infección recientemente.
El presidente de la Sociedad Española de Medicina Interna, el doctor Jesús Díez Manglano, explica que es normal que el cuerpo reaccione ante una sustancia que ya conoce, al haber sido ya inoculada.
Los estornudos, la mucosidad, la congestión nasal, el picor nasal o la fiebre leve son algunos síntomas que nos alertan también del regreso de la gripe y de los resfriados. Aunque, de momento, su incidencia no es muy alta, comienzan las dudas sobre si también podría ser coronavirus. El 40% de los españoles no sabe diferenciar bien los síntomas.
Por otro lado, un 51% de los ciudadanos es reacio a mostrar en público síntomas de la gripe o el resfriado por miedo a que se pueda confundir con el COVID. El experto, Bernardo Hernández, señala que los test de antígenos nos pueden despejare esa incógnita, pero en periodos muy concretos, y recomiendan aumentar su fiabilidad haciendo la prueba tres días después de la aparición de los síntomas.
