Durante el fin de semana, esta crecida ordinaria, en la ribera alta, el incremento del caudal ha anegado cultivos de cebada, trigo, brócoli y alfalfa. La punta de la crecida ordinaria, pilló el domingo por la tarde por sorpresa a las localidades de la Ribera Alta ya que las previsiones de la Confederación Hidrográfica era que la avenida de agua llegara el lunes por la mañana.
En Pradilla, los vecinos bombearon el agua de los riegos, pero no fue necesaria la intervención de los bomberos o protección civil. El alcalde, Raúl Moncín, valora que este año la crecida ha sido menor que las que se produjeron el pasado otoño.
Moncín ha pedido a las administraciones que avancen los planes de protección de las localidades y otras medidas de limpieza para intentar evitar daños mayores en episodios de crecida.