UGT, CGT, CCOO y CSIF en el Ayuntamiento de Huesca han manifestado su enérgica protesta por los usos del remanente de cinco millones de euros aprobado en el último pleno. Consideran un despropósito que con las carencias que se sufren en los diferentes servicios municipales el equipo de gobierno no haya destinado ni un solo euro a renovación de instalaciones, herramientas, vestuario o vehículos. Los sindicatos hablan de graves carencias que se sufren en los diferentes servicios municipales, con una flota de vehículos en una situación lamentable, y operarios con ropa y calzado adquirido por ellos mismos, o con prendas de otras administraciones.
Por otro lado, las instalaciones municipales también necesitan una potente inversión para adecuarla a sus necesidades, como los vestuarios de las naves municipales, las casetas de medio ambiente o el cementerio. Tampoco entienden el traslado de la sede de Servicios Sociales y el Patronato Municipal de Deportes a la antigua sede que ocupaba la Comarca de la Hoya, local por el que el Ayuntamiento paga un elevado alquiler, mientras le cede un edificio de su propiedad a la Comarca
Por su parte, el alcalde oscense Luis Felipe ha manifestado su respeto a los planteamientos de los representantes sindicales, pero les recuerda que no hay que confundir los términos superávit y remanentes y que la ciudad es mucho más que el personal y los servicios municipales. Además, asegura que determinadas inversiones de la ciudad sólo podían hacerse con cargo a los remanentes.