Actualmente, hay tan sólo tres celadores en los turnos de mañana y tarde en urgencias y dos en el turno de noche, y piden que haya al menos 4 durante el día y 3 por la noche de lunes a viernes. Recuerda Fernando Mancho, delegado de CSIF, que la labor de estos profesionales es esencial para dotar de la máxima fluidez posible al funcionamiento hospitalario, ya que son los responsables de trasladar a los pacientes o de que nunca falte material sanitario en los boxes.
Desde el sindicato señalan que el Royo Villanova ha experimentado un aumento de la demanda asistencial debido al crecimiento de la población en la margen izquierda, tras la que no se ha producido una adecuada actualización de la plantilla de celadores, que están cada vez más sobrecargados y tienen que asumir no sólo la mayor presión de las urgencias sino también el aumento de hospitalizaciones y pruebas o la atención a crónicos y dependientes.
Según Manchón, el aumento de la demanda asistencial de la última década se ha traducido en que se atienden 4000 urgencias más al año, lo que a su vez multiplica también el resto de la actividad hospitalaria. Si los celadores no llegan a todo, la circulación por el hospital se atasca, los equipos médicos tienen que estar esperando y el trabajo no fluye.
