Las Urgencias del Hospital Miguel Servet de Zaragoza siguen muy saturadas estos días, a pesar de que ha terminado el invierno y se reduce la incidencia de algunas patologías. Este miércoles por la mañana, ya tenían a 45 pacientes pendientes de ser ingresados en planta. Cuatro de ellos estaban en zonas de saturación, es decir, esperando en los pasillos, porque no queda espacio en ninguna de las salas de observación.
Fernando Manchón, enfermero y miembro de CSIF, advierte de que el problema se está cronificando, porque la población sigue creciendo, pero el hospital no. Por eso, desde el sindicato piden soluciones que no les hagan depender de otros hospitales que puedan absorber el exceso de demanda en situaciones puntuales.
"Hemos pedido que se habiliten espacios adicionales o se asigne una planta de apoyo a las urgencias, pero desde la Dirección del hospital no nos hacen caso", asegura Manchón.