La última obra del escritor Matías Candeira desgrana, en doce relatos, varias historias que, como él mismo explica “son historias atravesadas por una mirada cruel, a veces tierna, pero con mucho humor”. En algunos momentos, el lector podrá sentir incomodidad al ir adentrándose en “Un Dios con el estómago vacío”.
Precisamente este es el título también de uno de los cuentos. Sus protagonistas son personas a las que el mundo, su familia, sus amistades, la psique se desmorona y, a veces, utilizando el autoengaño intentan sobreponerse. Son historias de la vida misma, una realidad que en ocasiones da más miedo que la ficción.
Matías Candeira explica que la realidad puede asustar, por lo que también incluye en sus relatos una parte fantástica que sirve de contrapunto, de espejo a las personas protagonistas para revelar ese descenso a lo más profundo. Todo ello contado con mucho humor que permite navegar en la delgada línea que hay entre lo sublime y lo terrorífico de las historias.
