El edificio que se ha derrumbado esta mañana en la calle San Francisco de la capital, constaba de cinco plantas, dos bajo el nivel del suelo, y su fecha de construcción se sitúa en 1960. Una veintena de familias han tenido que ser desalojadas, aunque afortunadamente no hay que lamentar daños personales.
Sobre las once de la mañana los vecinos han empezado a percibir una serie de crujidos y han notado un falseo en uno de los pisos, por lo que han llamado a los bomberos, que han recomendado desalojar inmediatamente el edificio, así como otros adyacentes. El inspector de la policía local de Teruel, Ángel Loras, relataba que "estábamos desalojando a la última persona de uno de los bloques colindantes cuando hemos empezado a escuchar unos ruidos extraños y se ha caído el edificio".
La alcaldesa de la capital, Emma Buj, ha indicado que se estaba trabajando en los bajos de este bloque de viviendas, que tiene dos plantas bajo el nivel del suelo, "por la acumulación de agua debido a las tormentas de las últimas semanas, pero esto no significa que sea la causa del derrumbe".
Desde el ayuntamiento de la capital han activado de manera inmediata a los servicios sociales y a los psicólogos del 112 para auxiliar a los afectados, para los que se ha puesto a disposición el número de teléfono 689 11 67 58.
También la federación de vecinos ha puesto en marcha su red de voluntariado y los hosteleros están elaborando un listado con las plazas disponibles en sus establecimientos para realojar a las familias que tuvieron que abandonar sus hogares prácticamente con lo puesto.
