El Gobierno aragonés ha cerrado, en las últimas dos semanas, nueve operaciones de crédito para captar 686 millones de euros. Sumados a los préstamos previos, al adelanto de entregas a cuentas desde el Estado y al fondo de facilidad financiera, la Comunidad cuenta en estos momentos con 1.476 millones disponibles.
Esa liquidez extraordinaria permitirá seguir pagando a los proveedores, incluso en menor tiempo, y asumir todos los gastos derivados de la emergencia sanitaria. Esos gastos están creciendo exponencialmente, tanto en contratación como en material sanitario o ayudas sociales, al tiempo que los ingresos se reducen, por el descenso en la actividad económica y la moratoria en impuestos como los de Sucesiones y Donaciones. Por eso, el consejero de Hacienda, Carlos Pérez Anadón, espera que Europa flexibilice los límites de deuda y déficit.
Sobre la posibilidad de suspender el cobro de cuotas a los autónomos, como se plantea en Madrid, el consejero recuerda que la situación es distinta en Aragón: "Nuestro Estatuto nos obliga a que cualquier modificación tributaria se apruebe por ley. Conforme el Parlamento aragonés se reactive, iremos planteando alternativas fiscales".
El consejero ha recordado que todo el Presupuesto de la Comunidad Autónoma está a disposición de las necesidades que surjan de la crisis sanitaria. De hecho, no se ha puesto ningún límite económico a Sanidad o a Derechos Sociales para contratar profesionales y adquirir material. Esto puede hacer que algunas inversiones se retrasen, aunque Pérez Anadón ha insistido en que el Gobierno seguirá adelante con los nuevos hospitales de Teruel y Alcañiz.