Como complemento a las ayudas aprobadas la semana pasada por el Gobierno de España, el Ejecutivo aragonés también ha anunciado medidas para apoyar a los agricultores y ganaderos afectados por la sequía. Esta misma semana publicarán en el BOA una orden que flexibiliza las exigencias de la PAC y amplía el plazo para solicitar esas ayudas, un mes más, hasta el 30 de junio.
Además, subvencionarán los préstamos que contraten los agricultores, para que puedan afrontar la próxima campaña con liquidez, y no se descarta otro tipo de ayudas más directas. El consejero de Agricultura, Joaquín Olona, ha explicado que las cuantías dependerán de los daños que finalmente produzca la sequía y de las cantidades que se asignen a Aragón desde el Ministerio.
"Las cantidades serán muy importantes y serán las que se necesiten para que los agricultores y los ganaderos puedan hacer frente a la continuidad de sus explotaciones. La idea es préstamos subvencionados con el propósito de que no tengan coste financiero para los interesados. No descartamos que se pueda complementar con alguna otra medida más directa, pero esperamos a ver qué pasa con los cultivos", ha señalado Olona.
A más largo plazo, y en función del resultado electoral, el consejero se ha comprometido a aprobar un decreto-ley que sirva como marco normativo estable, para que este tipo de ayudas no tengan que aprobarse cada vez que se produce una contrariedad climática o de mercado. El objetivo es dejar abierta permanentemente esa financiación a coste cero y bonificar todos los seguros agrarios hasta el 70%.