El litigio por los bienes de la Diócesis de Barbastro-Monzón podría terminar muy pronto, después de años de espera, con el regreso de las 111 obras de arte que de momento siguen en el Museo de Lérida. El auto de ejecución dictado en diciembre obliga a Cataluña a devolver esas piezas antes del 15 de febrero y en Barbastro todo está preparado para recibirlas.
Este viernes el obispo de la diócesis altoaragonesa, Ángel Pérez, ha sido recibido por el presidente aragonés, Javier Lambán, en el Pignatelli, institución que ha acompañado a la diócesis en el proceso. Pérez se muestra optimista con el final de esta batalla que trasciende lo patrimonial y que ha sido posible gracias al trabajo conjunto con el Ejecutivo. Confía en el “soñado” regreso de las piezas y explica que el museo de la ciudad del Vero está perfectamente preparado para conservarlas y mostrarlas.
"EL GOBIERNO USARÁ TODOS LOS MEDIOS A SU ALCANCE"
El presidente Lambán ha destacado la valentía del obispo, capaz de dar el paso de recurrir a la vía judicial con resultados muy positivos, ya que los tribunales han acreditado la propiedad aragonesa. Aunque Cataluña se negase a devolver las piezas, y tras la experiencia de los bienes de Sijena, Lambán advierte que Aragón utilizará los medios a su alcance para forzar el regreso de las piezas.
El Gobierno aragonés seguirá colaborando con Barbastro en esta cuestión, ofreciendo asesoramiento cuando vuelvan las piezas o acometiendo las restauraciones que sean necesarias.