Dos de las premiadas este año por el gobierno de España, la comandante de la Guardia Civil Beatriz Berné y la profesora de periodismo Elena Bandrés, coinciden en la necesidad de poner el foco, desde sus respectivos ámbitos, en los agresores. La comandante de la benemérita señala que se echa en falta que haya más mecanismos de control sobre los agresores y su entorno, ya que los recursos se centran en hacer seguimiento de las víctimas para valorar el nivel de amenaza al que están expuestas.
La periodista e integrante de la asociación Periodistas por la Igualdad, por su parte, hace un llamamiento a la reflexión de los periodistas y reclama que desde los medios de comunicación se dé visibilidad a los agresores, publicando sus nombres, las fotos o grabaciones de su detención en lugar de recurrir a imágenes como el reguero de sangre donde ha sido atacada la víctima o traslado de su cadáver, que sólo contribuyen a alimentar el morbo.
Bandrés ha explicado que Periodistas por la Igualdad ha solicitado al Ministerio del Interior un protocolo para que los periodistas reciban información sobre los agresores cuando se produce una detención. Cree que el argumento de la presunción de inocencia en estos casos no es válido porque no hay ningún empacho en mostrar a imputados por otro tipo de delitos a quienes se ve esposados y cuyos nombres son publicados aunque sólo sean sospechosos.
