Los embalses turolenses están viendo en las últimas semanas como sus reservas siguen disminuyendo. Ahora mismo están al 74, 27 % de su capacidad y en la última semana han perdido un 2 %. Si lo comparamos con el año pasado la capacidad entonces era ligeramente inferior, ya que a comienzos de 2021 los pantanos tenían un 60 % de agua embalsada.
Si nos quedamos con los principales embalses, el de Calanda es el que más capacidad soporta de la provincia con 54 hectómetros cúbicos totales, ahora tiene 39.
Santolea es el segundo en capacidad y está casi a la mitad. De sus 43 hectómetros cúbicos posibles, tiene 24 ahora mismo. Y en el lado contrario está Cueva Foradada que está casi lleno ya que cuenta con 21 de los 22 hectómetros cúbicos totales.
El Embalse del Arquillo de la capital está al 79 % de su capacidad ya que ahora tiene 17 hectómetros cúbicos almacenados de los 21 que podría albergar. Es el nivel más bajo en agosto durante el ultimo lustro.
Lechago está al 50 % con 9 de los 18 hectómetros cúbicos posibles; misma capacidad máxima del embalse de Pena, que tiene ahora mismo 15 hectómetros cúbicos embalsados.