En Aragón empiezan ya los trabajos de recogida de las primeras variedades de fruta. En concreto, de la cereza en Caspe y Bajo Aragón o de albaricoque en La Litera. La campaña empieza con incertidumbres, por la climatología o la falta de mano de obra, aunque a priori las expectativas son buenas.
Los agricultores están muy pendientes del tiempo, dado que las heladas nocturnas previstas para próximos días pueden afectar a la campaña. Un año normal se recogen en nuestra Comunidad unos 700 millones de kilos de fruta y esperan poder moverse en esas cifras en 2024.
Estos trabajos requieren unos 20.000 temporeros y contratar esa mano de obra es otro de los principales problemas del sector. El responsable de fruta y relaciones laborales de UAGA en Aragón, Vicente López, explica que más o menos 10.000 trabajadores viven en la Comunidad, pero el resto deben ser contratados en otros países del norte de África o Europa del Este. “Si no fuera por ellos, no habría recogida de fruta”, dice Vicente, porque “aunque en España hay parados nadie quiere trabajar en la Agricultura”. Cree que el problema para encontrar temporeros no sólo se mantiene si no que se agravará año tras año debido a la situación del campo.