La ermita de Las Mártires espera poder abrir para la festividad de Santa Águeda el próximo 5 de febrero. Tras las obras de consolidación que se han llevado a cabo, el templo ha pasado con éxito la Inspección técnica de Edificios y está pendiente de la autorización final del Ayuntamiento. La Diócesis confía en que el consistorio dé una respuesta positiva ya que el informe remitido avala su reapertura. Así lo ha confirmado este jueves el delegado de Patrimonio de la Diócesis de Huesca José Ignacio Martínez.
La aparición de unas grietas provocó que la ermita no pasara la ITE en 2022, requisito que deben afrontar con carácter obligatorio los edificios con una antigüedad superior a los 50 años. La ermita se ha sometido a una actuación en profundidad, al igual que la vivienda anexa en la que vivía la santera. En el templo se ha realizado un drenaje perimetral en la parte del ábside, se ha consolidado parte del tejado y se ha actuado en las humedades que aparecieron en la fachada norte. "El espacio celebrativo está arreglado, falta recolocar los santos en su sitio y que la parroquia del Perpetuo Socorro, que coordina la ermita, programe las celebraciones oportunas", ha señalado Martínez.
El delegado de Patrimonio señalaba que todavía quedan otras actuaciones por realizar, pero los trabajos realizados hasta el momento permiten ya la apertura al culto de la ermita para la celebración de Santa Águeda, una festividad que cuenta con gran devoción entre las oscenses.
