Hace unas semanas abría sus puertas el Royal Hideaway Hotel de Canfranc, el nuevo hotel de cinco estrellas del grupo Barceló, que recibe a sus huéspedes en la icónica estación de Huesca inaugurada en 1928 y declarada Bien de Interés Cultural en 2002. La directora María Bellosta, nos habla en más de uno Huesca del reto que supone este nuevo proyecto, de la excelente acogida de estos primeros días y de las previsiones de ocupación para los próximos meses.
"Estamos abrumados con la expectación que ha generado la apertura. No tenemos capacidad para poder enseñar el interior a todo el mundo como nos gustaría. Los espacios del hotel y los tiempos son limitados, _señala la directora_, por eso pedimos comprensión a los visitantes, que entiendan en el interior hay un hotel de lujo y que hay que respetar a los clientes que buscan calma y poder disfrutar de la experiencia cómodamente y de la manera más agradable posible".
Con María Bellosta damos un paseo por el vestíbulo, habitaciones, restaurantes, spa y biblioteca del complejo. Su impresionante ubicación, rodeada de montañas en pleno Pirineo, y, sobre todo, su grandiosa arquitectura, hacen de este hotel un lugar único. La marca Royal Hideaway Hotels & Resorts está formada por hoteles-destino que se encuentran en localizaciones exclusivas, fuertemente vinculados a la cultura y al destino a través de la creación de experiencias únicas e irrepetibles. "Canfranc es un destino único y al hotel los huéspedes vienen buscando algo especial", ha apuntado Bellosta.
