Los servicios jurídicos del Ayuntamiento de Huesca estudian las posibles responsabilidades que se pudieran derivar de la protesta de los bomberos que este miércoles por la tarde obligó a interrumpir el pleno municipal.
Los trabajadores del servicio de extinción de incendios y salvamento de Huesca acudieron al inicio de la sesión con cacerolas, silbatos y pancartas para denunciar el desmantelamiento del servicio en la ciudad. Los manifestantes entraron en la sala y arrojaron al suelo los cascos y las camisetas del uniforme. Ya en la calle continuaron con una sonora pitada e incluso llegaron a lanzar petardos y bengalas de humo. El ruido obligó a suspender la sesión y a celebrar una Junta de Portavoces de forma urgente. El alcalde Luis Felipe apuntaba que los servicios jurídicos estudian lo ocurrido ayer para dirimir responsabilidades.
Los bomberos que tras la suspensión del pleno continuaron su manifestación por la ciudad y criticaron que nadie del Ayuntamiento se ha puesto en contacto con ellos para dialogar. Denuncian que la cadena de mando está sin cubrir, que no se convocan vacantes y la situación de inseguridad que sufren día a día en sus actuales instalaciones.