La ministra de Educación, Pilar Alegría, anunciaba una inversión de 200 millones de euros para adaptar climáticamente los centros escolares. Una inversión que se reflejará en un plan que se debatirá con las comunidades una vez se aprueben los Presupuestos generales del Estado en 2023.
Todos los años, en otoño o incluso invierno se han registrado días muy fríos que hacen que los alumnos estén con abrigos en las aulas y primaveras con temperaturas más propias del verano que hacen que estar en clase sea un suplicio. Desde FAPAR, Nieves Burón, recuerda que estos espacios no sólo están abiertos en periodo lectivo sino también se utilizan en otros momentos, por ejemplo, en verano con el programa “Abierto por vacaciones”.
Burón explica cómo a través de los fondos europeos se están realizando obras para mejorar la eficiencia energética como cambio de calderas o de ventanas. Además, las nuevas construcciones ya contemplan la orientación, los aislamientos, la presencia de árboles o sombras.