Automoción

Figueruelas vuelve al trabajo e inicia el año con incertidumbre

La plantilla confía en que no haya sobresaltos en la producción y poder evitar la aplicación del ERTE preventivo que adaptaría las plantillas a las necesidades de la planta.

Chema Catalán

Zaragoza |

Actividad en la planta de Stellantis en Figueruelas
Actividad en la planta de Stellantis en Figueruelas | Agencia EFE

Tras las vacaciones de Navidad, Stellantis regresa al trabajo en Figueruelas. Desde diciembre, está en vigor un ERTE preventivo como consecuencia de la supresión del turno de noche en montaje final ante la perspectiva de que caiga la producción. Los aproximadamente 300 trabajadores fueron trasladados a otros turnos de mañana y tarde.

Pese a que en verano se dejaron de ensamblar el Opel Crossland y el Citroën C3 Aircross, en 2024 salieron de la planta zaragozana 372.000 automóviles, lo que supone un aumento tímido de apenas el 2%. El presidente del comité de empresa, Rubén Alonso, espera que, en 2025, que será un año valle para el sector en transformación, se igualen por lo menos esas cifras para no tener que aplicar medidas de ajuste de empleo. El objetivo es que cuanto antes se pueda volver al trabajo en el turno nocturno de montaje final.

En la planta zaragozana, asumen que la prioridad es mantener el empleo a la espera de que la situación del sector mejore a partir de 2026, cuando empezará la producción de baterías en la gigafactoría de Stellantis. Un factor esencial será que repunten las ventas todavía bajas de coches eléctricos. Alonso en ese sentido reivindica ayudas europeas para incentivar las ventas y en países en conflicto político como Francia o Alemania, compradores de vehículos españoles.

Está todavía por ver si será necesario, a partir del verano, concentrar toda la producción – Opel Corsa, Lancia Ypsilon y Peugeot 208 – en una de las dos líneas para la electrificación de la otra.