Comisiones Obreras, UGT y CSIF mantienen la convocatoria de huelga en la sanidad pública para el 31 de marzo, aunque confían en alcanzar un pacto con el Gobierno aragonés que permita desconvocarla. Este miércoles han acudido a una primera reunión con los responsables de Sanidad, que ha arrancado con mucha tensión, porque el Ejecutivo ha puesto sobre la mesa el acuerdo alcanzado para la Atención Primaria con CESM y Fasamet.
Los sindicatos generalistas se niegan a hablar sobre ese documento, para el que no se les tuvo en cuenta, y han insistido en sus propias reivindicaciones, como la jornada de 35 horas semanales o la apertura de los centros de salud hasta las ocho de la tarde. La secretaria general de la Federación de Sanidad de Comisiones Obreras, Delia Lizana, es optimista, porque el Ejecutivo se ha comprometido a estudiar esas demandas y los ha emplazado a una nueva reunión el próximo lunes.