Don Quijote de la Mancha, David el Gnomo, Willy Fog o la familia Telerín fueron grandes éxitos de la animación que, además de llevar entretenimiento y diversión a los niños de los 70 y los 80, dejaron un valioso legado a los creadores que años después cosecharían grandes éxitos como Tadeo Jones, Planet 51, Pocoyó o Klaus y el cartero Jesper.
José Antonio Rodríguez, uno de los comisarios de esta exposición, afirma que España nunca ha ido a remolque de nadie, ni siquiera de la industria norteamericana, y es considerada una potencia que ha hecho grandes aportaciones al mundo de la ficción animada, lo que le permite estar disfrutando de una de las épocas más doradas de su historia.
Haciendo historia, hay que retroceder a 1915 para encontrar la primera obra de animación, El apache de Londres, que se encuentra desaparecida. El comisario de la muestra recalca el gran papel de los primeros creadores de la animación española, entre los que incluye al turolense Segundo de Chomón, miembro del grupo SEDA, que fue el primer estudio de animación de España..
