Los hospitales periféricos podrían dejar de ofrecer algunas especialidades, como la otorrinolaringología o la anatomía patológica, por la falta de médicos. En los próximos días, como consecuencia de los procesos de estabilización y traslados, muchos profesionales dejarán su plaza actual, y los llamamientos que se están realizando esta semana no van a servir para cubrir todas las vacantes.
La secretaria general del sindicato CESM, Mercedes Ortín, asegura que ninguno de los residentes que terminan su formación en septiembre ha querido acogerse al plan de fidelización del Gobierno aragonés, que les ofrecía un plus de hasta 30.000 euros en tres años, si elegían plazas de difícil cobertura. Ortín explica que siguen prefiriendo Zaragoza, y por eso han quedado más de 40 vacantes, la mayoría en los hospitales más pequeños, como el de Alcañiz; el de Barbastro; el Obispo Polanco, en Teruel, o el San Jorge, en Huesca.
En esos hospitales, hay algunas especialidades que solo tienen un puñado de plazas y, al no cubrirse, el servicio tendría que dejar de prestarse. "En el Obispo Polanco, por ejemplo, las tres plazas de otorrino van a quedar vacantes", señala Ortín. También van a faltar dos otorrinos en Barbastro y otros dos en Alcañiz. Algo parecido sucederá con anatomía patológica y con medicina física y rehabilitación. En este último caso, han quedado dos vacantes en el Obispo Polanco y otras dos en el San Jorge.
Quedan pendientes los llamamientos en Neurología y Urgencias, que fueron aplazados a este viernes, 20 de septiembre. Los sindicatos lamentan el caos y la falta de información por parte de Sanidad en todo este proceso.
